20/6/09

Se va el chaval, se va por el barranquillo

Los minutos en el metro los pasé aturdida, una mezcla de confusión y alivio, como el que sale de un túnel sabiendo que en pocos minutos volverá a la oscuridad de otro nuevo. Los árboles del Retiro me dijeron que ya había llegado, sola me habría perdido, caminaba cansada y mezclada entre la gente, podría ser cualquiera, quería ser cualquiera, cualquiera menos quien era en ese momento, no quedaba rastro de lo que hacía unas horas había pasado, salvo una rozadura de los zapatos de tacón.

Las tapas brillantes de libros nuevos te atraen de una manera que sólo un lector entiende pero que sólo un buen escritor puede explicar, y ése, no soy yo. Deslizas las mano por colores satinados, lees títulos que estás harto de escuchar publicitar a Matías Prats, ojeas otros totalmente desconocidos, adivinas cuáles tienen algo que ofrecer y aventuras cuáles tienen sólo un título.

Interceptas conversaciones ajenas cuando descubres que un lector de confianza, un cliente habitual, ha llegado, porque sólo a él le cuentan los secretos que tú quieres conocer, "éste es todo marketing" "sólo está bien escrito el título" "encantador" "maravilloso" "entretenido" "muy bueno y muy triste". ¿Cuánto tiempo podrás contemplar desde la esquina tal intercambio de información?. "Acabo de terminar aquél... qué ganas de acabarlo" "X de Y a veces se hace pesado" "el otro me lo acabé en dos horas, con eso no tengo yo pa'ná"

Las guías de viajes sólo me recuerdan a Nothing Hill. Nunca entenderé el porqué de su publicación masiva.

Nunca entenderé tantas cosas.

Una niña de ojos azules y rubio angelical me tira de la camiseta, me entrega un papelito y corre hacia su madre en el centro del paseo que carga con cientos de papelitos iguales... "¡CÓMO ADELGAZAR SONRIENDO!". Hija de puta. Ahora sé porqué ha salido corriendo.

4 comentarios:

  1. Sho te amo. Sólo tú podrías escribir una entrada sobre la feria del libro que haga que me emocione. Sólo tú y la maldita niña esa, gancho publicitario con sus rizos rubios. ¿Y eso no es explotación infantil? Y luego se queja la Pepa Flores.

    ¿Dónde están tus padres, bonita? Lo pregunto para meterte dentro del útero de tu madre, otra vez.

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  2. Faria18:51

    Qué pena que no pudiera irme contigo a la feria a perseguir a la niña rubia angelical que regala octavillas de indirectas... ¿Elegirá ella a los destinatarios o la madre que la parió? XD

    Poco puedo añadir yo. Bueno, algo sí: nunca compraré un libro de Javier Marías. Hasta ahora no me había atraído mucho, pero desde que le vi en la feria, mi sensación hacia él -irracional- se ha convertido en una declaración de intenciones fundada y sólida: no le voy a dar ni un duro porque no se lo merece... No está a la altura de sus lectores.

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  3. viena22:14

    Qué bien escribes!
    Cómo te entiendo... Yo salí así, totalmente aturdida. Bajé las escaleras del metro y me subí en el que pasaba. No era el que pretendía coger. Tampoco me importaba mucho. Veía pasar las paradas sentada al final de un vagón muy oscuro y muy viejuno. Todo me daba exactamente igual. Lo mejor es bajarse y coger el de vuelta, pero estoy demasiado ocupada explicando lo que ha pasado por mensaje. Me llama mi amiga que está en Madrid y me dice que baje, que vuelva, que nos vamos de tiendas. Yo no tengo ganas de ir de tiendas, todavía tengo que esconderme en un recoveco de los pasillos del metro y llamar a mi madre, que llora, y a mi preparador; pero recuerdo lo que me acaba de decir SIE, que me compre algo, que pase de todo, que vacaciones, por fin vacaciones y ¡de verano!. Le hago caso. Me siento infinitamente mejor.

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  4. A la niña habría que pegarle, pero sonriendo, claro.
    Sobre el examen... no quiero decir mucho ya que ya te lo he dicho todo en petit comité, sólo reiterarte que debes estar muy orgullosa de lo que has hecho pese a lo que os han hecho, a unos cuantos... qué vergüenza.
    Me ha encantado tu visión de la feria del libro. Pronto serás tú la lectora habitual que podrá cotillear de todas las novedades editoriales en lugar de las reformas legislativas, muy pronto, el tiempo pasa volando.
    Mua

    PS: Viena, ya te has examinado y has suspendido? o hablas de otro año? Ayyyy nena si has suspendido lo siento muchísimo, de verdad, y te extiendo lo dicho a SIE. Un abrazo.

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