12/10/05

William Shakespeare

Let those who are in favour with their stars
Of public honour and proud titles boast,
Whilst I, whom Fortune of such triumph bars,
Unlook'd-for joy in that I honour most.

Great princes' favourites their fair leaves spread
But as the marigold at the sun's eye,
And in themselves their pride lies buried,
For at a frown they in their glory die.

The painful warrior famoused for worth,
After a thousand victories once foil'd,
Is from the book of honour razed forth,
And all the rest forgot for which he toil'd:

Then happy I, that love and am beloved
Where I may not remove nor be removed.


Dedicado a dos grandes personajes (Mr. Hyde & El Fantasma de la Ópera) por la sencilla razón de que se lo debo, a ellos no podría sorprenderles nada de lo que yo dijera, tras tantas conversaciones pasadas... pero tal vez si le sorprendan las palabras del gran Shakespeare, por que esas dos líneas a modo de conclusión encierran una gran verdad, y a veces, en la oscuridad, en la soledad o simplemente cuando nos sentimos más tristes de lo que es habitual... pueden servir de luz.
Hace poco yo decía que no me gusta estar feliz porque suele ser un breve instante en comparación con la mala racha que me viene detrás... pero también es cierto que a menudo somos felices y nos empeñamos en no darnos cuenta, agarrándonos a cualquier resquicio de tristeza en el que podamos apoyar nuestros argumentos victimistas, y es que cuando uno tiene un espíritu pesimista es muy duro no dejarse llevar por él, las películas drámaticas son las que se llevan premios y por eso nos resistimos a que nuestra vida no sea un interesante drama en lugar de una comedia feliciana o una historia cotidiana... pero eso tiene como razón de ser la mala costumbre de pararnos a analizar nuestra vida como si de un guión se tratase, analizando punto por punto, escena por escena... pero lo importante será la obra completa, y las cosas verdaderamente importantes no se pueden analizar... o al menos no las analizará su protagonista.


Bien, después de todo este rollo pretendidamente profundo que dudo reciba algún comentario, tengo la cortesía de poner la traducción al español más acertada que encontré, que tampoco refleja bien la belleza del soneto pero, bueno, los destinatarios me agradecerán cualquier cosa que no esté escrita en inglés jajaja


Que a los favorecidos por los astros
de honores y de títulos se ufanen;
Yo, que la suerte priva de esos triunfos,
hallo mi dicha en lo que más venero.

Los favoritos de los grandes príncipes
abren al sol sus hojas cual caléndulas,
y su orgullo sepultan en sí mismos
pues los abate un ceño que se frunce.

El célebre guerrero laborioso,
derrotado una vez tras mil victorias,
es del libro de honores suprimido
y de su gesta lo demás se olvida.

Felíz de mí, que amando soy amado,
y ni puedo cambiar ni ser cambiado.

9 comentarios:

  1. Alguien me dijo una vez que era un sacrilegio que admirara tanto la obra de Shakespeare y no conociera sus sonetos. Lo cierto es que ahora me arrepiento, porque este te aseguro que me ha conmovido. En primer lugar por la dedicatoria, que me ha llegado al corazón, y porque lo que has escrito, eso que tu calificas de pretendidamente profundo, realmente me ha emocionado. Lo realmente importante de una dedicatoria es emocionar, porque algunos lo confunden con un simple cortar y pegar, conectándose a alguna pagina de frases celebres. Pero este poema me ha tocado la fibra sensible, por muchas razones. Es Shakespeare, y le tengo una reverencial admiración a un autor que, cruzando a través de los siglos, ha conseguido emocionarme con su teatro sin necesidad de empachosos romances de novela barata. Con “Otelo” descubrí los celos, con “Hamlet” la duda, con “Titus” el valor del verdadero honor y lo vacuo del que solemos identificar con nuestro orgullo. Por otro lado, el soneto en si es una preciosidad y realmente me llega, sobre todo en este momento que estoy viviendo. Habla de aquellos que depositan en su orgullo su felicidad y del verdadero valor de ser capaz de amar. Siempre digo que felicidad y tristeza no son mas que segmentos intercalados en nuestra vida, y el resto del tiempo nuestras preocupaciones cotidianas, la rutina caótica, nos impide darnos cuenta de todo lo demás. Vivimos momentos felices o momentos tristes, y tenemos recuerdos felices o tristes. Lo irónico es que los felices suelen ser compartidos, los tristes mas bien solitarios. Posiblemente porque la tristeza nos humilla y tendemos a vivirla en soledad, y la felicidad nos invita a compartir. Por eso finalmente confundimos los elementos de esta torre de naipes tan delicada, y directamente identificamos felicidad con compañía, y compañía con amor. A veces, por desgracia ocurre y me ha ocurrido, nos obsesionamos tanto con el desamor que sufrimos que no nos damos cuenta del verdadero valor de una mano amiga, una palabra sincera y una mirada llena de afecto.

    Muchísimas gracias, de todo corazón.

    ResponderEliminar
  2. no había analizado la influencia del cine (y en general de las obras narrativas, incluidas las de la televisión) en el estado de ánimo colectivo: cierto, muy cierto, las historias tristes, de lucha, las dramáticas son las que son aplaudidas, las que son elevadas al nivel de arte

    woody allen y los hermanos cohen nos van dando lecciones al respecto

    es una lástima que así sean las cosas porque entonces pueden llegar instantes como el que vivías hace poco donde no te gustaba ser feliz, te parecía obvio que habría de llegar el infortunio

    sin embargo has comprendido que hay más que dos polos, entre el blanco y el negro hay una gama interminable de grises

    qué bueno que dejaste comment en mi blog, absolutamente nadie es intruso ahí, hay blogs donde se percibe eso por el código cerrado que emplean, espero que en el mío no se perciba eso

    seguiré frecuentándote

    (y me uno a los que reciben el regalo shakespeareano, fue muy grato leer las dos versiones . gracias!!!)

    ResponderEliminar
  3. HYDE: Pues, no sé que decirte, un simple no es nada se va a ver raro jeje así que te voy a recordar por enésima vez que esa mano amiga y esa palabra sincera (a veces demasiado... lo sé) la tienes porque te la mereces, porque te la has ganado, y porque es fácil comprender la obsesión de un desamor. Ciao


    ALBERTO: En primer lugar, he de dar la bienvenida al primer "comentarista" transoceánico...cosa que me alegra mucho ya que, el leer tu comentario, me demuestra que he conseguido expresar esa sensación que quería transmitir porque veo que lo has entendido perfectamente, es muy agradable el sentir la comprensión de alguien... simplemente a través de unas líneas. Será un honor recibir próximas visitas. Grazie & Ciao

    ResponderEliminar
  4. Then happy I, that love and am beloved
    Where I may not remove nor be removed...

    Gracias, amiga desconocida... a mí también me ha emocionado tanto la obra, como tu post, como el comentario de hyde...

    Dicen que tras la sonrisa de un payaso se esconde una gran tristeza...

    ResponderEliminar
  5. En fin, muchas gracias Pedro... primero por lo de amiga jaja y segundo, porque me está alegrando ver que elegí bien mi soneto favorito de shakespeare porque es justo una emoción lo que a mí me transmitía, una sensación de felicidad por lo que tienes... y que me digais que sentís esa especie de emoción es estupendo, me hace doblemente feliz jajaja...

    PD. Eso sí, ya no pronostico nada más porque dije que no habría comentarios jejeje Grazie & Ciao

    ResponderEliminar
  6. Pero qué culta que eres, sometimes. Mi blog al lado del tuyo es como poner 'Gran Hermano' junto a 'Negro sobre blanco'.

    ResponderEliminar
  7. Creo que es la primera vez que me llaman eso y no se si tomármelo bien o mal jajaja lo tomaré como que eres muy exagerado STIFMEISTER jajaja pero seguro que es culpa de este post pretendidamente profundo y tu pasión por la literatura no??, en fin, gracias por comentar y dar la cara. Ciao

    PD. A mí me gusta tu blog, ya lo sabes... no creo que sea gran hermano y ¡por dios! espero que esto no se parezca a negro sobre blanco que era aburridísimo.

    ResponderEliminar
  8. Yo siempre doy la cara, aunque a veces me la partan...
    A mi también me gusta tu blog, y como muestra de ello voy a ponerle un link en el mío, para que mis visitantes te visiten (si no tienes inconveniente claro).
    A Sánchez Dragó había que leerle entre líneas. A él le escuché hablar del sexo tántrico, que ahora es una religión para mí.

    ResponderEliminar
  9. Que a los favorecidos por los astros
    de honores y de títulos se ufanen;
    Yo, que la suerte priva de esos triunfos,
    hallo mi dicha en lo que más venero.


    ¿Creías que no iba a comentar en la entrada más importante (quizá o quizás) del blog, la única "SIE es profunda" (y no PP, como nos quieres hacer ver)?


    Sólo puedo aseverar:

    Sakespeare no era Bécquer, puedes respirar tranquila, él no mato a la poesía en su país, de hecho los ocultistas se ufanan por decir que era una de las encarnaciones del maestro Saint German, pero eso es otra historia que puede contar un latino.

    Yo sólo soy un faro con mi dedo. Señalo la importancia obcecadamente.

    Para que la historia me guarde algún lugar entre sus blogs (los libros del mundo serán quemados a no más tardar).

    El poeta custodia tus recuerdos para que no tengas, por desgracia, que volver a sentirlos. Puedes seguir escribiendo biólogos para que todos tengamos orgasmos (twittea esto último, anda).

    ResponderEliminar